La mirada política de Patricio Grez de Heeckeren.
Como dicen en Broadway...The Show Must Go On.....el espectáculo continúa imparable. Cuando todavía no está bien digerido el largo rosario de casos históricos de corrupción, se suma ahora don Simón Escalona, hermano del senador PS. Durante 10 años Simón apareció como funcionario de Gendarmería siendo que estuvo en "comisión de servicio" permanentemente y no se le conoce aporte. Es de público conocimiento que los hermanitos Escalona nunca le han trabajado un peso a nadie, ni emprendido nada, ni dado empleo, ni nada parecido, ellos viven exclusivamente de mamar impuestos de los contribuyentes. También supimos que la corrupción llegó al Registro Civil donde tuvieron que echar al director y subdirectores. Incluso en un par de municipios con alcaldes UDI hay olor a corruptela o despelote.
Y Mofletín Lavín salió a dejar la zorra de nuevo, con premeditación y alevosía, en parte para tirar una cortina de humo que tape las responsabilidades de su yerno en Huechuraba. Mal estuvo nuevamente don Joaquín...en fin qué se le va a hacer...paciencia. Mofletín Lavín siempre fue un poco excéntrico y lamentablemente su excentricidad, combinada con su resentimiento por salir tercero el 2005, lo llevaron a tomar un derrotero torcido, el derrotero del picado con ataques de narcisismo enfermizo.... "Mis palabras son muchas veces incomprendidas en nuestro sector, pero finalmente terminan por imponerse". Ese cuadro siquiátrico a su vez se potenció con los malos consejos estratégicos que recibe de sepa Moya cual gurú o gurúes. "Joaquín", le dicen al oído, "tienes que posicionarte, al electorado no le gusta el conflicto y las peleas chicas". "A la gente no le gusta tanto reclamo por la corrupción", agregan los gurúes de su círculo. Lavín debiera despedir a sus gurúes y recurrir a un buen siquiatra para sanarse de sus trancas. Por mi parte se me hace difícil volver a votar por este gil, estoy harto de sus pelotudeces y su completa irresponsabilidad.
Mofletín no conversó con los diputados de la Alianza, no leyó el texto de la acusación constitucional, no es abogado y no tiene porqué saber si los fundamentos jurídicos de la acusación constitucional a la Yasnita tienen validez. Pero nada de eso le importa, Mofletín se pasa a los diputados de la UDI por el arco de triunfo, le importa una raja si la acusación constitucional a la Yasnita tiene bases o no tiene bases. Solo le importa posicionarse haciéndose el lindo y al mismo tiempo es evidente que goza después de cada una de sus cagadas pues en el fondo son una venganza.
Lo embarga un profundo resentimiento contra su sector pues de ser el eterno candidato y la pinturita máxima por años, fue abandonado y salió tercero. El tipo tiene un perfil psicológico complejo pues casi no tiene ancho de banda, solo sabe sonreír, casi como un tic de sonrisa. Un tipo normal ventila sus alegrías y sus rabias y frustraciones de manera normal. Un tipo normal se alegra, canta de felicidad, se enoja, grita, insulta, llora. Pero Mofletín no es normal, no sabe hacerlo. En vez de juntarse con la plana mayor de la UDI tras las elecciones y manifestarles derechamente su rabia, el hombre se retiró a un seudo período Sabático y desde ahí---sin perder nunca su edulcorada sonrisa---ventila su rabia torpedeando a la Alianza cada vez que puede, es como un profesor que yo tenía en el Sein Yorch...le decíamos el maricón sonriente pues nos tiraba a cagar sin nunca parar de sonreír.
