Buena estuvo Tolerancia Cero del Domingo. El villano invitado era Ricardo el Magnífico, que se mandó varias frases para el bronce: "Lo que hace la diferencia es la línea divisoria entre quienes creen que el mercado lo resuelve todo y los que creemos que hay ciertos temas de la sociedad que son muy importantes y que no los resuelve el mercado, los resuelven los ciudadanos".
O sea según él hay una inexistente "línea divisoria" que divide a los chilenos entre los pérfidos que "privilegian a mercado" y los generosos progre que "privilegian a la ciudadanía". Muy impresionante. Pero no estoy ni ahí con sus cuchufletas maniqueas. Por lo demás no hay ninguna contradicción entre "privilegiar al mercado" y "privilegiar a la ciudadanía". Es un mero juego de palabras vacías para justificar ese estatismo izquierdoso intervencionista trasnochado que está en el ADN más íntimo de Ricardo y que coincide con el nuevo slogan de Care-moai, máz Eztado, mucho máz Eztado...ahora yo zoy zúper eztatizta..
El mercado y los ciudadanos son una misma cosa. El mercado no es otra cosa que los ciudadanos intercambiando libremente productos y servicios. No hay mercado sin ciudadanos, el mercado son los ciudadanos libres interactuando voluntariamente, no es otra cosa.
Por ejemplo, si entre todos los contribuyentes les financiamos un subsidio de salud a los pobres y clase media necesitada (tal como ocurre ahora), y en lugar de obligarlos a acudir a picantísimos Hospitales Estatales (tal como ocurre ahora), los dejáramos usar ese subsidio para pagar sus servicios de salud donde le plazca (tal como NO ocurre ahora), esa sería una solución de mercado, que privilegia la Libertad de los Ciudadanos para elegir donde recurren por servicios de salud .
Yo le aseguro a usted que Ricardo, que como ex presidente recibe suculentos 7 millones mensuales(*) de los contribuyentes, prefiere ir a la clínica privada más cuica, y no le gustaría que lo obliguen a ir a un picante Hospital Estatal donde tal vez le inyectarían erróneamente un anticoagulante y la Reina se iría cortada.
Tatán Piñera le sugirió a mi Gordis que mejor visite la convulsionada Araucanía en vez de seguir haciéndole propaganda al candidato oficialista acompañándolo por enésima vez a la región de Los Lagos. Care-Moai Frei le replicó "Yo por prinzipio no zoy quién, y menoz el candidato de la deresshhha, para darle inztrukzionez a mi Prezidenta. Mi Prezidenta tiene muy claro cuál es zu trabajo, cuál es su rezponzabilidad, o zea hazerme rezpirazión artifizial puez mi candidatura eztá pal gato." Mi pobre Gordis va a terminar estressada con tanto tironeo.
(*) N de R:
Más unos cuántos billetitos para pagar las oficinas de sus centro de estudios, más el pago de cuentas, en resumidas cuentas Lagos le cuesta a los contribuyentes, bastante sufridos, el sueldo de unos 100 trabajadores que reciben el miserable salario mínimo.
