miércoles, 12 de mayo de 2010

Comentario Político Semanal, por Patricio Grez de H.


¿Que pasaría si el gobierno de Piñera decide enviar un proyecto para legalizar el aborto?...¿Y si propone estatizar la banca?...¿O estatizar los colegios particulares?....¿O declarar la inamovilidad de toooos los chaaajaooores, agregando un sueldo mínimo obligatorio de $3,500,000?...¿O fijar todos los precios en la mitad del nivel actual?...¿Se podrá criticar?...¿Me irá a quitar el saludo la rubia de verdad, la rubia entera, la senadora Evelyncita Matthei?...¿Que tontería irá a decir la rubia taxi, la senadora Pérez?...¿Donde estará escrito que quienes votamos por Piñera no podamos criticar algunas de las cosas que está haciendo como presidente de Chilito?....todas esas ideas revolotean en mi mente atormentada.


El proyecto de ley para la reconstrucción tiene pocas caras de ser aprobado por la mayoría de la concerta en el parlamento. Es cosa de leer lo que dicen gente como Latorre, el enano Zaldívar, Stalin Escalona y varios otros del mismo toque. Es cierto que entre los parlamentarios de la Concerta hay gente como el DC Hosaín Sabag, o los senadores DC Walker, a esos gallos siempre lo he encontrado de otro nivel. Y hasta al senador Navarro, otrora ultra entre los ultra, lo veo con una mejor disposición, pero el resto, con Pizarro a la cabeza, van a buscar cualquier pretexto para rechazarlo. Lo que no me parecería tan mala noticia por lo demás. Si se rechaza ese proyecto quiere decir que se rechazan los aumentos de impuestos que tanta polémica han causado. Y quiere decir que el ministro Larraín va a tener que pegarle un muy buen apretón al enorme presupuesto estatal de $45.000 misshones de morlacos para financiar la reconstrucción.


¿Usted sabe cuanto reasignó Larraín del presupuesto estatal para la reconstrucción?...$700 millones de dólares, lo que vendría siendo exactamente un pichulésimo por ciento del total de $45,000 millones, la nada misma. Hay que entrar con tijera firme para recortar gastos y juntar esa platita. Hay que ponerse como los griegos, aunque salgan algunos bolse-caca a tirar bombas molotov. Querido presidente, no le tema a las bombas molotov, no le tema a la concerta, no les siga haciendo la pata, no creo que le sirva, ojalá me equivoque.


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