lunes, 22 de octubre de 2007

Desalojo con Lucro y Femicidio, por Patricio Grez de Heeckeren

Siempre he sostenido que Goebbels es una alpargata vieja al lado de los propagandistas de la izquierda. Tienen un talento especial para crear "marcos mentales" en las masas. Basta ver a Fidel que esconde su horrorosa dictadura totalitaria tras un machaqueo diario en las mentes de los cubanos, llevan 50 años "en alerta" contra la invasión del imperialismo, según la prensa estatal (la única), los gringos tiene un ejército de tres millones de soldados armados hasta los dientes y concentrados en Key West, listos para invadir al "único territorio libre de América" como se refería a Cuba nuestro proyecto de Fidel chilensis, el Chicho q.e.p.d.

El estupendo libro de Andrés, "El Desalojo...porqué la Concerta debe irse el 2010" también fue objeto de esta manipulación izquierdosa, en un intento por transformarlo en boomerang dándole un sentido golpista que no tiene ni remotamente, es un llamado al desalojo con cariño, sin odio, sin violencia, un desalojo con los votos, por razones muy bien explicadas en ese libro que millones deberían leer. Antes de eso nuestros progre iniciaron su ataque salvaje a la libertad de enseñanza con la chiva del "antilucro". Y ahora nos salen con esta insólita cuchufleta del "Femicidio Político".

A falta de proyectos y logros que defender, de ideas que discutir, de conceptos sobre los que anclar el debate democrático, los estrategas del segundo piso de Palacio han puesto su futuro en las manos de los gurús de la publicidad, convencidos de que la política no es más que una mercancía de consumo en cuya venta no caben ni siquiera las oraciones subordinadas. No hace demasiado tiempo se trataba de dar con una idea; simple, escueta, contundente, desnuda, fácil de asimilar y de exponer, pero una idea, un fruto de cierta reflexión intelectual que aspiraba a condensar las aspiraciones de un grupo o a reflejar una visión de la sociedad y de su futuro.

Eso ya es arqueología; ahora la cuestión es hallar una frase. Una simple expresión cuyo sentido empiece y acabe en su propio enunciado. Un significante sin significado, un envoltorio sin contenido, una fachada sin casa, un vestido sin cuerpo, un libro sin hojas. Un pictograma, una carcasa, un icono. Un fuego de pirotecnia que se disuelva en el aire con un brillante y ruidoso estallido.

Todo este esfuerzo de desnutrición mental tiende a crear anorexia intelectual, liviandad ideológica, frivolidad política. Filmar un plano, encontrar una palabra, acuñar una consigna para tener la llave de un poder que entre todos hemos convertido en el triste guión de un espectáculo barato, de una sórdida comedia hueca, superficial y volátil, Mofletín Lavín es nuestro campeón en ese juego sin contenido.

Son solo píldoras de banalidad para consumo de masas, el epítome de la política-espectáculo, el delirio cúspide de la oquedad sonora, los ecos orwellianos de la propaganda superpuestos a las voces del pensamiento o el análisis. El marketing como valor supremo, y espere usted las próximas campañas, ya no será la franja en la tele, será el youtubismo como expresión de una doctrina con menos peso que un paquete de cabritas.

A propósito recomiendo con mucha énfasis ver un testimonio impresionante en YouTube del glorioso comandante que cambió su uniforme verde oliva por un buzo de Nike, ...haga click aquí please
http://www.youtube.com/watch?v=MbzciUAiOxQ

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