Todos sabemos cuáles son las costumbres de la izquierda en cuanto a la propiedad privada. No les gusta, prefieren la propiedad estatal, supuestamente "de todos" pero en la práctica de poderosos burócratas estatales, o peor aún, de nadie.
La propiedad privada implica cuidadores con interés propio; ningún bosque corre riesgo si pertenece a alguien.
¿A que vengo con esto?...muy fácil...el proyecto de reforma constitucional ingresado por mi Gordis este viernes elimina la siguiente frase de la Constitución: " Los derechos de los particulares sobre las aguas, reconocidos o constituidos en conformidad a la ley, otorgarán a sus titulares la propiedad sobre ellos"
El proyecto, ingresado una semana antes de la segunda vuelta, es electoral. Ataca la propiedad privada para provocar a la pérfida deressshhha y demostrar que son unos egoístas por querer permitir a particuliares tener propiedad sobre el agua, que es un bien escaso. Ellos prefieren que sea manejada por poderosos burócratas iluminados. Los argumentos son los de siempre de la izquierdosidad, solo los burócratas estatales pueden cuidar el "bien común", por eso mejor que ellos administren. Ese argumento se puede aplicar al agua, al pan, al vino, la madera, los condones, la piscola, las micros, las radios, los canales de televisión, los diarios, los caballos, las vacas, los chanchos, las putas y no tan putas...y para que seguir...así funciona (es un decir) la economía en Cuba y Corea del Norte.
Precisamente porque el agua es escasa es por lo que tiene que existir un sistema enfocado a la propiedad privada para su aprovechamiento. La propiedad tiene sentido de hecho cuando de bienes escasos se trata. Que sea el Estado quien la distribuya tiene un nombre: colectivismo, y se va a prestar para chanchullos, abusos, ineficiencia, amiguismos y corrupción, como ya la conocemos.
La libertad no existe sin propiedad privada y la propiedad privada deja de existir cuando es controlada por el gobierno. Nuestros izquierdosos y progre están empeñados en que dejemos de ser “dueños” y nos convirtamos en simples “inquilinos”, sujetos a sus instrucciones, por el "bien de la humanidad". Pero las consecuencias de eso están a la vista de quienes quieran ver, que se remitan a los fracasados experimentos socialistas, lean la historia, y repito... que vayan a Cuba o a Corea del Norte...allá ni el agua ni nada es propiedad privada, todo es propiedad estatal.
La propiedad privada implica cuidadores con interés propio; ningún bosque corre riesgo si pertenece a alguien.
¿A que vengo con esto?...muy fácil...el proyecto de reforma constitucional ingresado por mi Gordis este viernes elimina la siguiente frase de la Constitución: " Los derechos de los particulares sobre las aguas, reconocidos o constituidos en conformidad a la ley, otorgarán a sus titulares la propiedad sobre ellos"
El proyecto, ingresado una semana antes de la segunda vuelta, es electoral. Ataca la propiedad privada para provocar a la pérfida deressshhha y demostrar que son unos egoístas por querer permitir a particuliares tener propiedad sobre el agua, que es un bien escaso. Ellos prefieren que sea manejada por poderosos burócratas iluminados. Los argumentos son los de siempre de la izquierdosidad, solo los burócratas estatales pueden cuidar el "bien común", por eso mejor que ellos administren. Ese argumento se puede aplicar al agua, al pan, al vino, la madera, los condones, la piscola, las micros, las radios, los canales de televisión, los diarios, los caballos, las vacas, los chanchos, las putas y no tan putas...y para que seguir...así funciona (es un decir) la economía en Cuba y Corea del Norte.
Precisamente porque el agua es escasa es por lo que tiene que existir un sistema enfocado a la propiedad privada para su aprovechamiento. La propiedad tiene sentido de hecho cuando de bienes escasos se trata. Que sea el Estado quien la distribuya tiene un nombre: colectivismo, y se va a prestar para chanchullos, abusos, ineficiencia, amiguismos y corrupción, como ya la conocemos.
La libertad no existe sin propiedad privada y la propiedad privada deja de existir cuando es controlada por el gobierno. Nuestros izquierdosos y progre están empeñados en que dejemos de ser “dueños” y nos convirtamos en simples “inquilinos”, sujetos a sus instrucciones, por el "bien de la humanidad". Pero las consecuencias de eso están a la vista de quienes quieran ver, que se remitan a los fracasados experimentos socialistas, lean la historia, y repito... que vayan a Cuba o a Corea del Norte...allá ni el agua ni nada es propiedad privada, todo es propiedad estatal.
